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domingo, 7 de septiembre de 2014

De aquí para allá

Como llevamos un tiempo sin escribir, hoy toca una entrada larguita. De hecho, hemos recorrido un buen trecho desde la última vez.
Nos quedamos volviendo desde Suecia donde tomamos un ferry hasta Alemania, y aprovechamos para ver un pueblecito del noreste, Stralsund. Nos gustó bastante, no sabemos si condicionados por las en general insulsas ciudades escandinavas. Perteneciente a la liga Hanseática, se puede apreciar mucho más que la famosa ciudad de Bergen, ya que se conservación ha sido mejor.



Después, nos dirijimos a Dresden en nuestro camino a República Checa. Es una ciudad casi completamente reconstruida tras la II Guerra Mundial. La "ciudad vieja" es muy agradable para pasear, con avenidas amplias y edificios muy chulos. Tiene varias iglesias, el antiguo palacio, y un mural de cerámica muy bonito, famoso por sus más de 100 metros de longitud, en la fachada de las antiguas caballerizas. Nos gustó especialmente que encontramos un sitio para comer bastante genuino del que salimos encantados!!!



De ahí enfilamos hacia un destino al que teníamos muchas ganas: Praga!!! Poco podemos decir, salvo que es una ciudad especial, mágica o, como ellos mismos dicen, de cuento de hadas. Tuvimos la suerte de hacer una visita guiada con Andrés (un chaval bien majete), muy completa, con mucha información y muy amena, que nos sirvió para conocer algo de su historia y evolución. No hay desperdicio en esta ciudad aunque los emblemáticos puente de Carlos IV, castillo y catedral medievales y Plaza del Reloj, tienen más que merecida su fama pese a la abrumadora cantidad de turismo incluso en estas fechas, demasiado. Buenííísima la cerveza checa y riquísima su cocina en todas sus versiones.Y sí, música en directo en cada rincón.












Desde Praga nos acercamos a Kutna Hora ( que está a "kutna hora"). No está mal. Nos gustó un montón un osario que es famoso, y que tiene huesos de más de 40000 cadáveres decorando la estancia.




Yendo más hacia el sur, paramos en el castillo de Karlstejn, que por fuera es espectacular. Por dentro sólo vimos una torre que no estaba rehabilitada pero que tenía unos frescos en la escalera que son una joya.
 

 

Nuestra siguiente y última parada en Chequia fue en el pintoresco pueblecito de Česky Krumlov. Sus callejuelas permanecen prácticamente inalteradas desde épocas medievales, y tiene un castillo erigido en una pared rocosa. Lástima que mucha gente lo sabe y estaba atestado. Aún así no pierde su encanto.
 

 


3 comentarios:

  1. Qué chulas las fotos! Muchos besos!!

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  2. A nosotros Praga nos enamoró tb, nada es feo ni nada esta fuera de lugar...
    Venga que seguimo viajando con vosotros....

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  3. Muy chulo todo!!!! (el chiste de kutna hora, genial! jajajajaja)

    Oyeee, que poco a poco vais yendo al sur! En relativamente poco tiempo os volvemos a ver, no? :)

    Seguid disfrutando! Besossss

    Josu

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