Dejamos atrás las playas caribeñas para desplazarnos a México DF, donde pasaríamos una semanita en compañía de Carlos, Alfredo y Fátima.
He de decir que al final en DF no pasamos más que un par de días ya que habíamos conocido la ciudad hace un año y nuestros amigos curraban, por lo que nos acercamos unos días al estado de Guanajuato para conocer dos de sus ciudades más representativas.
La primera a la que llegamos fue la ciudad que da nombre al Estado, posee una de las universidades más importantes del país y eso se nota cuando la recorres, ya que tiene un ambiente fantástico y muy joven.
Guanajuato invita a ser recorrida a pie y así lo hicimos nosotros. Callejear por todo el centro nos resultó súper agradable y entre callejones y casas de vívidos colores fuimos descubriendo una pequeña parte de los tesoros que se ocultan en su interior. Los templos que se encuentran en el centro bien merecen una visita y no sólo observarlos por fuera. El edificio de la universidad y el teatro Juárez son un fijo en cualquier recorrido, al igual que el callejón del beso que tiene su propia leyenda. Por último la vista de Guanajuato desde el monumento a Pipila nos ofrece una bonita panorámica.
El ambiente nocturno es igual o mejor que el diurno, destaca la gran cantidad de tunos que recorren las calles y callejones seguidos de montones de personas en lo que se llaman las "callejoneadas" que consisten en contar historias y cantar canciones. Lo pasamos en grande siguiéndoles.
La siguiente visita fue San Miguel de Allende que es patrimonio de la Humanidad. Llegar a esta ciudad fue una grata sorpresa, de marcado ambiente colonial y cuidada con esmero, es un gusto pasear entre mercados de artesanía, galerías de arte, bellos edificios históricos que se combinan a la perfección con viviendas pintorescas e innumerables puestos de comida. La parroquia de San Miguel nos pareció espectacular y parece sacada de un cuento.
Aquí conocimos a Coby, un californiano que como nosotros estaba viajando por el continente americano y que tenía muchas ganas de compartir sus experiencias, pasamos un buen rato con él y esperamos coincidir en otro lugar.
Que sitios más bonitos!!!
ResponderEliminarYa habéis cruzado el charco! no os he seguido en unos días y cómo habéis corrido! a ver si os puedo alcanzar alguna vez.. jejeje
ResponderEliminarUn fuerte abrazo